Izar
MASCOTA {B}
raza
mensajes
puntos
Amo
Mascota
Mascota
Mascota
Pareja
Empleo
i'm your friendly neighbor
Y ahí estaba yo, jugando en un callejón donde muchos humanos se reunían a jugar baloncesto… aun no entendía las reglas del juego pero era lindo que me dejaran quedarme y esconderme cuando me escapaba de la residencia en la que me obligaban a estar.
Como era temprano aun no llegaba nadie así que estaba en el suelo leyendo lo que me presentaron como comics, recientemente le había tomado el gusto a los que hablaban de héroes con trajes especiales, pero siempre que intentaba buscar alguno eran todo menos super héroes.
Así que, a falta de uno, YO me haría el mío… o al menos eso intentaría. Estaba el de una armadura roja… nah, tenía poca tecnología a mi alcance, además… ¿Quién se pondría algo rojo y quisiera pasar inadvertido? También estaba el del martillo… nah, hasta yo admitía que los rayos y yo no teníamos buena química. También uno grandote y verde, y… oh vamos ¿tengo que explicar que me faltaba además de la altura, la evidente masa corporal? y por otro lado estaba el que se columpiaba… también tenía el problema del rojo, pero yo podía hacer eso de estirarme para columpiarme y trasladarme de un lado a otro... o eso era lo que intenté hacer sin mucho éxito aparente; al parecer me faltaba algo que no estaba escrito en los tomos que tenía al alcance ya que mi mano terminaba resbalando o simplemente me golpeaba la cara intentando cambiar de una pared a otra. Aun a pesar de los intentos fallidos estaba resultando bastante divertido… no tanto los golpes en mi humanidad… pero divertido a final de cuentas, pero mi diversión de ese día debía pausarse para comer o terminaría con mi energía antes de llegar a medio día.
Caminar entre la gente no era mi actividad favorita, ya que algunos intentaban tocar partes privadas aprovechando la aglomeración de la calle pero al parecer no había muchas opciones si quería habitar en ese lugar; aun así solo me limite a seguir avanzando mientras robaba bocadillos de la gente que comía cerca de mí, algunos notaban de inmediato que les habían robado y otros jamás notaron el hurto de un pedazo de su comida; se suponía que no debía robar pero el detenerme por completo no era algo que quisiera hacer en un futuro ni próximo ni lejano.
Me terminé sentando en la jardinera de uno de esos restaurantes con muchas mesas en el exterior y empecé a comerme lo que podía describir como una “hamburguesa mutante de pollo, res, pescado empanizado, pizza y papas fritas de aderezo”; comí sin mucha prisa mirando a la gente pasar, haciendo tropezar a uno que otro ladrón de poca monta estirando mis piernas tanto como podía; algunos escapaban y otros recibían una paliza publica muy divertida de ver, aunque bueno podían ser mejores.
Cuando noté que varias personas se habían dado cuenta que tenía su comida faltante simplemente me levanté de mi asiento y fui caminé en dirección al callejón donde seguramente pasaría otro rato tratando de averiguar que podía hacer para ayudar con mi fisonomía en esa sociedad.
Como era temprano aun no llegaba nadie así que estaba en el suelo leyendo lo que me presentaron como comics, recientemente le había tomado el gusto a los que hablaban de héroes con trajes especiales, pero siempre que intentaba buscar alguno eran todo menos super héroes.
Así que, a falta de uno, YO me haría el mío… o al menos eso intentaría. Estaba el de una armadura roja… nah, tenía poca tecnología a mi alcance, además… ¿Quién se pondría algo rojo y quisiera pasar inadvertido? También estaba el del martillo… nah, hasta yo admitía que los rayos y yo no teníamos buena química. También uno grandote y verde, y… oh vamos ¿tengo que explicar que me faltaba además de la altura, la evidente masa corporal? y por otro lado estaba el que se columpiaba… también tenía el problema del rojo, pero yo podía hacer eso de estirarme para columpiarme y trasladarme de un lado a otro... o eso era lo que intenté hacer sin mucho éxito aparente; al parecer me faltaba algo que no estaba escrito en los tomos que tenía al alcance ya que mi mano terminaba resbalando o simplemente me golpeaba la cara intentando cambiar de una pared a otra. Aun a pesar de los intentos fallidos estaba resultando bastante divertido… no tanto los golpes en mi humanidad… pero divertido a final de cuentas, pero mi diversión de ese día debía pausarse para comer o terminaría con mi energía antes de llegar a medio día.
Caminar entre la gente no era mi actividad favorita, ya que algunos intentaban tocar partes privadas aprovechando la aglomeración de la calle pero al parecer no había muchas opciones si quería habitar en ese lugar; aun así solo me limite a seguir avanzando mientras robaba bocadillos de la gente que comía cerca de mí, algunos notaban de inmediato que les habían robado y otros jamás notaron el hurto de un pedazo de su comida; se suponía que no debía robar pero el detenerme por completo no era algo que quisiera hacer en un futuro ni próximo ni lejano.
Me terminé sentando en la jardinera de uno de esos restaurantes con muchas mesas en el exterior y empecé a comerme lo que podía describir como una “hamburguesa mutante de pollo, res, pescado empanizado, pizza y papas fritas de aderezo”; comí sin mucha prisa mirando a la gente pasar, haciendo tropezar a uno que otro ladrón de poca monta estirando mis piernas tanto como podía; algunos escapaban y otros recibían una paliza publica muy divertida de ver, aunque bueno podían ser mejores.
Cuando noté que varias personas se habían dado cuenta que tenía su comida faltante simplemente me levanté de mi asiento y fui caminé en dirección al callejón donde seguramente pasaría otro rato tratando de averiguar que podía hacer para ayudar con mi fisonomía en esa sociedad.
Lugar: calles y callejones de Queens ★ Con Ray ★ Privado
—HakrabiRay
AMO {B}
raza
mensajes
puntos
Amo
Mascota
Mascota
Mascota
Pareja
Empleo
I'M YOUR FRIENDLY NEIGHBOR (PRIV)
.
Me estaba recuperando, creo, pero no estaba bien, aun sentía las llamaradas al caminar bajo el sol y seguía soñando con paisajes de ninguna parte… – esto no sirve – musite saliendo de aquella oficina más enojado y molesto sin mencionar a aquellos vigilantes de seguridad que me escoltaban hasta la salida con temor de que provocara otro incidente o que me diera una recaída.
En ocasiones pensaba que nada se solucionaría, las voces desaparecían en ocasiones, pero en cualquier momento regresarían, nunca sabría si todo lo que eh vivido ah sucedido, nunca diferenciaba un sueño de la realidad, incluso en estos momentos sentía el peso de las armas y el equipo como si nunca hubiese dejado las zonas de conflicto…. Las multitudes despreocupadas eran mucho peor que los mercenarios, que los terroristas, solo ocupaban espacio y se aprovechaban de los incautos, en otros sitios les hubiese cortado las manos pero en estos lares era mejor tirarle los dientes y caminar por callejones, por zonas menos concurridas y pues eso es lo que hacía, avanzar desamado y despejar la mente, pensando que quizás en un futuro toda la ciudad sea consumida por las llamas y volver a cantar a todo pulmón – My son, have courage, you do well to trust in god…. Rigth now, in mountains and valleys there Will be a joyous war, a wild game in Meadows and trailings, the Eagle in clouds and air, vitory, victory is ours, victory is ours, victory is ours – dejando salir aquel suspiro de emoción y arrepentimiento de cantar aquella melodía, sabiendo que dios me había abandonado y solo los demonios de mi cabeza me atormentaban, pero estos estaban silenciosos antes mis delirios, solo en esos momentos se callaban y podía ver lo que me rodeaba, una cancha vacía y algunos insectos rondando el lugar pero no era solo eso, había alguien más y sabía que me había visto, sabía que nuestras miradas se habían cruzado, también sabía que no se traía nada bueno por la forma en que caminaba, estaba bastante seguro que escapaba de algo pero sin importar la situación debía ser amable, no amenazar a la gente y tampoco gritarle que se largaran… maldita psicóloga, no hacías bien tu trabajo aun que siguiese esas recomendaciones y por ello, sin dudar levante mi mano en señal de saludo rogando que aquella chica no se acercara a hablarme.
Nerito y Albinos S.S.
Me estaba recuperando, creo, pero no estaba bien, aun sentía las llamaradas al caminar bajo el sol y seguía soñando con paisajes de ninguna parte… – esto no sirve – musite saliendo de aquella oficina más enojado y molesto sin mencionar a aquellos vigilantes de seguridad que me escoltaban hasta la salida con temor de que provocara otro incidente o que me diera una recaída.
En ocasiones pensaba que nada se solucionaría, las voces desaparecían en ocasiones, pero en cualquier momento regresarían, nunca sabría si todo lo que eh vivido ah sucedido, nunca diferenciaba un sueño de la realidad, incluso en estos momentos sentía el peso de las armas y el equipo como si nunca hubiese dejado las zonas de conflicto…. Las multitudes despreocupadas eran mucho peor que los mercenarios, que los terroristas, solo ocupaban espacio y se aprovechaban de los incautos, en otros sitios les hubiese cortado las manos pero en estos lares era mejor tirarle los dientes y caminar por callejones, por zonas menos concurridas y pues eso es lo que hacía, avanzar desamado y despejar la mente, pensando que quizás en un futuro toda la ciudad sea consumida por las llamas y volver a cantar a todo pulmón – My son, have courage, you do well to trust in god…. Rigth now, in mountains and valleys there Will be a joyous war, a wild game in Meadows and trailings, the Eagle in clouds and air, vitory, victory is ours, victory is ours, victory is ours – dejando salir aquel suspiro de emoción y arrepentimiento de cantar aquella melodía, sabiendo que dios me había abandonado y solo los demonios de mi cabeza me atormentaban, pero estos estaban silenciosos antes mis delirios, solo en esos momentos se callaban y podía ver lo que me rodeaba, una cancha vacía y algunos insectos rondando el lugar pero no era solo eso, había alguien más y sabía que me había visto, sabía que nuestras miradas se habían cruzado, también sabía que no se traía nada bueno por la forma en que caminaba, estaba bastante seguro que escapaba de algo pero sin importar la situación debía ser amable, no amenazar a la gente y tampoco gritarle que se largaran… maldita psicóloga, no hacías bien tu trabajo aun que siguiese esas recomendaciones y por ello, sin dudar levante mi mano en señal de saludo rogando que aquella chica no se acercara a hablarme.
- la cancion:
Izar
MASCOTA {B}
raza
mensajes
puntos
Amo
Mascota
Mascota
Mascota
Pareja
Empleo
i'm your friendly neighbor
No esperaba que la ciudad fuese tan tranquila a esa hora del día… a decir verdad la primera vez que llegué a esa área había tantos humanos jóvenes que me costaba dar un paso sin chocar con uno o 2 chicos. Mi camino a aquella área era tremendamente aburrido al que me encantaba dar pasos pausados y dramáticos casi como quisiera golpear a alguien por “accidente”, pero para mí mala suerte nadie se cruzó en mi camino así que al momento de llegar me sentí ligeramente decepcionada.
Volví a mi pasatiempo adquirido de lectura gráfica, mientras seguía comparando mi estructura corporal con aquellas criaturas no fue hasta que oí un andar curioso que me hizo levantar la vista de mi lectura, le vi cantar como si fuera un demente y sin quererlo termine por abrir la boca de manera incrédula, apenas entendía lo que vociferaba pero mi instinto me gritaba por recurrir a castigo de aislamiento… casi podía ver mi estadía en aquella prisión donde ya hubiera drogado a un prisionero hasta hacerlo perder la conciencia al punto que tenían que unirlo a soporte vital o dejaría de respirar.
PERO… ya no estaba en esa estrella y ya no tenia derecho de tomar acciones… al menos no, sin que se considerara una agresión directa a los derechos humanos universales… o algo así, la verdad era que solo podía entender que no podía hacer nada por mucho que me hubiera gustado al menos no tan invasivamente. Así que me levanté de mi lugar y empecé a caminar en dirección a aquella persona.
En mi mente podía imaginarle quebrandose mentalmente y agrediendo a cualquier forma de vida que se le cruzara por medio así que no pude evitar sonreír con nerviosismo cuando le vi saludarme en lo que interprete como algo de timidez.
Definitivamente le debía una disculpa por pensar mal de su persona, así que solo podía ayudarle a calmarse ya fuera por las buenas o por las malas; le saludé imitando su gesto sin dejar de avanzar a su dirección y cuando le tenía lo suficientemente cerca lo abracé tan fuerte como para poder anestesiarle a base de aromaterapia (y joder que era complicado tomando en cuenta que debía concentrarme en calentar la superficie de la piel al punto de desprender un aroma) aunque podía apostar mi cena de esa noche a que al pobre le daría algo parecido a la indigestión por culpa de lo que había comido antes y seguramente entraría en su “vapor calmante”.
No quería invadirlo o desmayarlo ahí mismo así que me quede unos segundos así antes de soltarlo y tomarlo por los hombros -Creí que necesitaba un abrazo ¿se siente mejor?- mi talento para mentir no era exactamente el mejor pero si tenía que ser honesta, preferia incomodarlo invadiendo su espacio personal a tener que noquearlo como si se tratara de un asalto y atentado a su integridad... por ahora.
Volví a mi pasatiempo adquirido de lectura gráfica, mientras seguía comparando mi estructura corporal con aquellas criaturas no fue hasta que oí un andar curioso que me hizo levantar la vista de mi lectura, le vi cantar como si fuera un demente y sin quererlo termine por abrir la boca de manera incrédula, apenas entendía lo que vociferaba pero mi instinto me gritaba por recurrir a castigo de aislamiento… casi podía ver mi estadía en aquella prisión donde ya hubiera drogado a un prisionero hasta hacerlo perder la conciencia al punto que tenían que unirlo a soporte vital o dejaría de respirar.
PERO… ya no estaba en esa estrella y ya no tenia derecho de tomar acciones… al menos no, sin que se considerara una agresión directa a los derechos humanos universales… o algo así, la verdad era que solo podía entender que no podía hacer nada por mucho que me hubiera gustado al menos no tan invasivamente. Así que me levanté de mi lugar y empecé a caminar en dirección a aquella persona.
En mi mente podía imaginarle quebrandose mentalmente y agrediendo a cualquier forma de vida que se le cruzara por medio así que no pude evitar sonreír con nerviosismo cuando le vi saludarme en lo que interprete como algo de timidez.
Definitivamente le debía una disculpa por pensar mal de su persona, así que solo podía ayudarle a calmarse ya fuera por las buenas o por las malas; le saludé imitando su gesto sin dejar de avanzar a su dirección y cuando le tenía lo suficientemente cerca lo abracé tan fuerte como para poder anestesiarle a base de aromaterapia (y joder que era complicado tomando en cuenta que debía concentrarme en calentar la superficie de la piel al punto de desprender un aroma) aunque podía apostar mi cena de esa noche a que al pobre le daría algo parecido a la indigestión por culpa de lo que había comido antes y seguramente entraría en su “vapor calmante”.
No quería invadirlo o desmayarlo ahí mismo así que me quede unos segundos así antes de soltarlo y tomarlo por los hombros -Creí que necesitaba un abrazo ¿se siente mejor?- mi talento para mentir no era exactamente el mejor pero si tenía que ser honesta, preferia incomodarlo invadiendo su espacio personal a tener que noquearlo como si se tratara de un asalto y atentado a su integridad... por ahora.
Lugar: calles y callejones de Queens ★ Con Ray ★ Privado
—HakrabiContenido patrocinado
raza
mensajes
puntos
Amo
Mascota
Mascota
Mascota
Pareja
Empleo
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.
|
|